sábado, 21 de noviembre de 2009

Esperando el futuro...

Ya no soy más una jovencita, entonces en 2040 ¡espero estar viva! Si Dios permite, quiero llegar a los cien años ¡en buena forma! Por eso, hoy procuro tener una vida saludable, hacer actividades físicas…El único problema es que tengo una adicción a los cigarrillos…Muy malo, lo sé…


Mis chiquitos pelean conmigo, viven diciéndome: “mamá, ¡no hagas esto, no es bueno!”, yo los comprendo, sé que se preocupan por mí…Yo sé, yo sé… Pero estoy intentando no hacer más uso de los cigarrillos. Es difícil, demasiado…Pero estoy intentando…Les prometo que voy a tener persistencia.


A pesar de esta “pequeña” imperfección, soy una viejita lista, contenta, de buena gana y espero poder estar fuerte para ver a mis hijos y nietos todos casados y llenos de chiquitos… ¡Quiero poder cocinar para ellos mis famosos “dulces de maní”!


En 2040, sueño ver un mundo mejor. Sé que no es algo fácil. Sé que hoy los hombres, muchos de ellos, se están olvidando de plantar buenas semillas, de cuidar de sus espacios, del entorno, de enseñar buenas prácticas y buenos valores a sus hijos. Sé de las dificultades por las cuales pasamos hoy. ¡El mundo está muy complicado! ¡Es algo duro educar a los chicos! Sí, sí, yo lo sé hace muchos años, queridos… Pero aún así, este es el camino más compensador y feliz. Tuvo diez hijos y gracias a Dios, puedo decir que hice un buen trabajo y espero que ellos transmitan esto a los suyos. La vida es así, no para. Es un ciclo. Debemos propagar las buenas actitudes y los buenos valores.


En 2040, deseo que mi vida, que nuestra vida, que la vida de todos esté caminando más tranquila, en paz y que las personas hayan visto lo que realmente es esencial para vivir bien. Deseo, sinceramente, que el respeto, el amor a los otros, la justicia sean cosas normales, cosas por las cuales no tengamos que pelear siempre y siempre para ver en el cotidiano.

Que Dio nos oiga…!Y los hombres también!

No hay comentarios:

Publicar un comentario